Inmersa en preparar mi próxima charla: Chuches y salud infantil, me ratifico de la falta de responsabilidad de los que nos llamamos adultos, del desconocimiento que tenemos de cómo funciona nuestro organismo y, en este caso concreto, de cómo afecta a nuestro sistema digestivo el consumo de “ciertos productos”, de cómo nos seduce la Industria Alimentaria y de la falta de una Legislación Alimentaria (Estado) que, en realidad, vele por nuestra salud. Nos olvidamos que, realmente, lo que deseamos es vivir en SALUD, que desconocemos lo que ponemos en las manos de nuestros niños, de nuestros jóvenes…, que nos dejamos llevar por el mundo de la imagen, esa atractiva publicidad que nos atrae hacia el consumo de productos…, que no de alimentos. Productos que cada día están creando más enfermedades. Un bebé de meses no pide su primer gusanito, somos los adultos quiénes se lo ofrecemos, sin darnos cuenta que abrimos la caja de pandora… Productos preparados, que enganchan y que son demandados en detrimento del consumo de alimentos. Excesos de…, en favor de carencias de nutrientes. "No robarás... el apetito de tus hijos con comida malsana" (Julio Basulto).
Pilar López Martín –Naturópata
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